Estoy buscando...:

2 jul 2011

Mientras los colores cambian

¿Creerías que estoy loca si en el impulso de cortar el silencio empiezo a decir insensateces? ¿O también has notado que, aunque parezca extraño, todo en este cuarto es irreal? Nuestro sudor, lo que digamos, tu aliento, el ruido de los autos invadiendo, las sábanas revueltas, la biblioteca y las ventanas. No podría aburrirme en mucho tiempo, pues todo se transforma en todo momento. Siempre estoy descubriendo. A veces es una sensación nueva que traen tus dientes, a veces es una palabra que se te resbala por los labios. En ocasiones es pensar que todo es un juego que podríamos tomar muy en serio. Por horas respiro el alivio de pensar que no vamos a ningún lado, de creer que no perdemos; a veces da rabia no quedarse esperando hasta que se pueda avanzar, hasta recibir un premio. Causa gracia pararse a jugar a los espejos y disponerse a jurarle al resto de la semana que no pasa nada. No hay problema, si reímos es porque en la oscuridad parcial no llegamos a oír nada. Nos daremos por unos minutos la espalda para fingir que estamos ausentes, pensar estupideces y volveremos a juntarnos para no hacer nada. Es seguro que sufrimos con las dudas sentadas en la falda. Pero sabemos con una certeza espeluznante que nos gusta andar corriendo mientras los colores cambian.